viernes, marzo 29, 2024
Juan Bosch Lema copy

6 de noviembre de 1906: se casan en La Vega José Bosch Subirats y Ángela Gaviño, quienes serán sus progenitores.

30 de junio de 1909: Nace en La Vega Juan Emilio Bosch Gaviño.

1932: Escribe el cuento “La Mujer”, su primera obra traducida a otros idiomas. Empieza a colaborar en la revista Bahoruco, dirigida en Santo Domingo por Horacio Blanco Fombona.

24 de noviembre de 1933: Juan Bosch publica su primer libro de cuentos: Camino Real.

Enero de 1934: Juan Bosch es apresado por la policía de Trujillo, conducido primero a la Fortaleza Ozama y luego a Nigua.

Enero de 1935: Se casa con Isabel García Aguiar.

1936: Juan Bosch publica su novela La Mañosa.

26 de diciembre de 1936: Nace su primer hijo, León Bosch García.

Enero de 1938: Juan Bosch llega a Puerto Rico con 90 dólares en los bolsillos, acompañado por su esposa en estado de gravidez y su hijo León. Se inicia su autoexilio de 23 años.

Febrero de 1938: Bosch es contratado por Adolfo Hostos para dirigir la recopilación de las Obras Completas de Eugenio María de Hostos.

14 de marzo de 1938: Nace en San Juan, Puerto Rico, su hija Carolina.

1939: Bosch es enviado a La Habana, Cuba por el comité pro-homenaje a Hostos para supervisar y dirigir la edición de las Obras Completas del humanista puertorriqueño.

1939: Juan Bosch funda en La Habana, Cuba, el Partido Revolucionario Dominicano, estimulado por el Dr. Enrique Cotubanamá Henríquez.

29 de marzo de 1943: Se inicia en La Habana, Cuba, el Congreso del Partido Revolucionario Dominicano, quedando aprobada la doctrina del partido escrita por el Dr. Enrique Cotubanamá Henríquez en 1939.

30 de junio de 1943: Juan Bosch contrae matrimonio en Cuba con Carmen Quidiello. 20 de julio 1946: Nace en La Habana, Cuba, Patricio Bosch Quidiello.

20 de diciembre de 1951: Nace en San José, Costa Rica, su Bárbara Bosch Quidiello. 20 de octubre de 1961: Juan Bosch regresa a la República Dominicana.

20 de diciembre de 1962: Juan Bosch es electo presidente de la República Dominicana.

25 de septiembre de 1963: Juan Bosch, tras 7 meses de gobierno, es derrocado de la presidencia de la República Dominicana por un golpe de Estado cívico-militar.

18 de noviembre de 1973: anuncia la creación del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

15 de diciembre de 1973: Es fundado el Partido de la Liberación Dominicana.

Enero de 1976: Reunión del Tribunal Russell en Roma bajo la presidencia de Juan Bosch.

28 de febrero de 1988: El Partido de la Liberación Dominicana adopta el boschismo como su teoría.

16 de mayo de 1990: El Partido de la Liberación Dominicana, con Juan Bosch como candidato a la presidencia, se convierte en el partido mayoritario de la nación, obteniendo las senadurías en 12 provincias, así como 44 diputados, 34 sindicaturas y 187 regidores. Un gigantesco fraude electoral, que contó con la complicidad del Dr. José Francisco Peña Gómez, candidato presidencial del PRD, desconoció el triunfo de Juan Bosch.

19 de junio de 1994: Bosch, con 83 años de edad, durante el Segundo Pleno Nacional de Dirigentes del PLD, anuncia la renuncia de sus posiciones ejecutivas dentro del partido, alegando razones de edad y enfermedad.

30 de junio de 1996: El mismo día del cumpleaños de Juan Bosch, el Partido de la Liberación Dominicana gana las elecciones nacionales, llevando a la presidencia del país a uno de sus alumnos, Leonel Fernández.

1 de noviembre de 2001: fallece el Profesor Juan Bosch, en Santo Domingo. Sus restos están sepultados en el Cementerio Ornamental de La Vega, su ciudad natal.

JUAN EMILIO BOSCH GAVIÑO

(1909-2001)

Fundador del Partido de la Liberación Dominicana*

Nació en La Vega en 1909. Desde muy joven se inició en las letras. Siendo un adolescente escribió el cuento “Camino Real”. Perteneció al grupo literario “La Cueva”. En1936 publicó su primera novela, La Mañosa. Acusado de conspirar contra el régimen de Trujillo fue encarcelado al inicio de la tiranía. Puesto en libertad, pasó luego a laborar en la Oficina Nacional de Estadística. De esa posición renunció en 1937, y abandonó el país rumbo a Puerto Rico.

Ya en autoexilio se unió a la lucha antitrujillista y fundó junto a otros exiliados el Partido Revolucionario Dominicano en 1939. Bosch tuvo una gran actividad política en Cuba, donde contó con la ayuda de presidentes y otros funcionarios. Asimismo estuvo ligado a la dirección del abortado movimiento de Cayo Confites (1949). Fue secretario particular del presidente cubano Prío Socarrás.

Abandonó Cuba luego del triunfo de la revolución que encabezó Fidel Castro, en 1959.

Fue profesor del Instituto Internacional de Ciencias Políticas en Costa Rica en 1960.

Tras la muerte de Trujillo, regresó al país en octubre de 1961 y se dedicó a la organización del Partido Revolucionario Dominicano (PRD); con ese partido participó en las elecciones de diciembre de 1962, en las que ganó la Presidencia de la República.

Fue derrocado a los siete meses por un movimiento reaccionario de civiles y militares que se opuso a los cambios que intentó introducir en el gobierno.

Detenido en Palacio Nacional fue deportado del país hacia Puerto Rico; desde allí, en contacto permanente con su partido y sectores militares jóvenes dirigió los hilos de una trama que originó un movimiento armado, en principio cuartelario, luego revuelta popular, que trató de reponerlo en el poder.

Este acontecimiento, que se inició el 24 de abril de 1965, fue tomado como pretexto por el gobierno norteamericano de Lindon B. Johnson para la segunda intervención militar norteamericana en Santo Domingo, hecho que originó la resistencia patriótica de casi todo el pueblo.

Bosch participó en las elecciones de 1966, bajo condiciones muy desiguales, y perdió del Dr. Joaquín Balaguer, candidato de las fuerzas políticas y económicas poderosas nativas y norteamericanas.

En 1973, a finales, luego de presentar a su organización la “Tesis de la Dictadura con Respaldo Popular”, renunció al PRD, fundando casi de inmediato el Partido de la Liberación Dominicana. Con el PLD, Bosch participó en cinco elecciones en 1978, 82, 86, 90 y 94.

Juan Bosch falleció el primero de noviembre del 2001 a las 3:15 am, atacado por una insuficiencia respiratoria aguda en el Centro de Medicina Avanzada Doctor Abel González. Fue sepultado en su natal ciudad de La Vega en donde reposan sus restos en el histórico Cementerio Ornamental de la llamada culta y olímpica ciudad.

Completando este perfil biográfico publicamos más abajo una cronología de fechas importantes en la vida del líder histórico del PLD, profesor Juan Bosch.

*Tomado de los apuntes biográficos escritos por el compañero
Euclides Gutiérrez Félix.

“Si no puedo ver por mí mismo la liberación de este pueblo, la veré a través de mis ideas”.

  1. Si no puedo ver por mí mismo la liberación de este pueblo, la veré a través de mis ideas”.
  2. “Nuestra aspiración es que un día, cuando los niños que están empezando hoy a hablar sean hombres viejos y de nosotros no quede sino una cruz sobre una tumba, esos viejos les digan a sus hijos que el compañero Juan vivió y murió pensando cada hora de cada día en servir a su pueblo”.
  1. “Si mi vida llegara a ser tan importante que se justifica- ra algún día escribir sobre ella, habría que empezar di- ciendo: “Nació en La Vega, República  Dominicana.  El 30 de junio de 1909, y volvió a nacer en San Juan de Puerto Rico a principios de 1938, cuando la lectura de los originales de Eugenio María de Hostos le permitió conocer qué fuerzas mueven el alma de un hombre con- sagrado al servicio de los demás”.
  1. “Si no se es capaz de desear lo excepcional, lo grandioso, y de ponerse a buscarlo, no se es hombre completo”.
  2. “Para juzgar a un hombre no basta con lo que haya he- cho, sino que hay que tomar en cuenta aquello que no hizo debiendo hacerlo”.
  3. “Los personajes que aspiran al poder o lo alcanzan, sólo valen cuando salen indemnes del juicio histórico. Para los hombres de poder, el triunfo no está en alcanzarlo, sino en merecerlo”.
  4. “A menudo sucede que los que conquistan la gloria co- mienzan fracasando, y si no tienen valor para olvidar la desgracia y luchar hasta conquistar la victoria, no lle- gan a lograr lo que proponen”.
  5. “En realidad, dos cosas han guiado mi vida de escritor y político, dos fuerzas, dos impulsos: uno es servirle a mi pueblo, ese ha sido permanente desde que tengo con- ciencia; cuando fui teniendo conciencia de que los seres humanos como individuos son una cosa y como pueblo son otra, ya no tenía que dedicarle mi atención al indi- viduo, fuera vieja, fuera niño o fuera hombre sino al pueblo. El segundo impulso es hacer bien lo que estoy haciendo (…) No me importa nada más. Para mí, los honores, los bienes reales, la nombradía, la gloria, nada de eso significa nada”.
  6. “Nadie se muere de verdad si queda en el mundo quien respete su memoria”.
  1. “El porvenir de los pueblos es obra de sus hijos más que de sus padres, de los que viven y de los que van a vivir, más que de aquellos que rindieron sus tareas y se mar- charon con los siglos. La obra buena de los muertos, como su obra mala, es propiedad de la historia; pero la obra buena del porvenir es el fruto de las buenas inten- ciones y de la capacidad para convertirlas en hechos”.
  1. “Hay personas que creen que los hechos históricos son producidos por los grandes hombres, y resulta que es al revés; son los hechos históricos los que producen a los grandes hombres”.
  1. “Ningún hombre es superior a su pueblo”.
  1. “Es difícil acabar con el pasado, porque el pasado está vivo en el presente si hay un solo actor del hecho actual que responde a los sentimientos o las ideas de atrás”.
  1. “Lo único verdaderamente cierto que se da en la política como en la vida es que cada pueblo como cada ser hu- mano tiene su propia historia y sólo puede avanzar en el camino hacia el porvenir siguiendo la dirección que le marca esa historia, y utilizando sus propias fuerzas y sus propias experiencias. Puede apoyarse en experiencias aje- nas y en fuerzas ajenas pero no puede suplantar con ellas las que son suyas”.
  1. “No hay arma más potente que la verdad en manos de los buenos”.
  1. “La verdad no es un artículo que se compra y se vende con beneficios”.
  1. “Toda obra digna para a menudo bajo las sombras de la infamia; el que combate, sin embargo, no puede dete- nerse ante la infamia”.
  1. “Los infundios son infundios y la verdad es la verdad, y la verdad queda fija e inconmovible, entera y pura, cuan- do el viento de los años, pasando entre los infundios, los va haciendo polvo”.
  1. “Nadie que tenga miedo puede hacer obras de impor- tancia. Tampoco hay que tener más valor de la cuenta, como les ocurre a algunos de los locos que pueblan la tierra, y creen que el valor les ha sido concedido para hacer el mal y abusar de los débiles”.
  1. “El valor por sí sólo sirve para matar y morir, no para dirigir y triunfar”.
  1. “La lucha de los pueblos es constante; nacen mártires donde muere uno: florecen las ideas allí donde las persi- guen; un pasado heroico, cuajado de nobles hombres, estimula a los jóvenes e ilumina el porvenir”.
  1. “Los hombres no saben vivir aplastados por el terror, y allí donde sufren, allí alimentan la esperanza de vencer al infortunio”.
  1. “Los pueblos dignos, como los hombres con estatura moral, buscan dar, no recibir; buscan ayudar, no pedir ayuda”.
  1. “No basta tener ideas; hay que hacerlas realidad en lo grande y en lo minúsculo”.
  1. “El hombre no puede cumplir su destino en la sociedad sino convierte sus ideas y sus deseos en hechos, porque sólo los hechos tienen verdadero valor en la vida social”.
  1. “Sólo quien reconoce la grandeza ajena puede ser gran- de, y que los que discuten la gloria de otros carecen del derecho a disfrutar la propia”.
  1. “Lo perfecto es enemigo de lo bueno, y el hombre no debe aspirar a ser perfecto sino bueno nada más. Cuan- do se pasa de los límites de lo bueno y se entra en el afán de la perfección, lo que se hace es cultivar la vanidad, la vanidad individual; cultivar un sentimiento realmente mezquino, porque es un sentimiento que se limita a la persona que lo tiene. Por tanto no se debe ser perfeccio- nista, pero se debe tratar de hacer las cosas bien”.
  1. “El destino de cada uno está en la educación que se le haya dado. Para que su conducta sea buena, el hombre tiene que ser mejor educado”.
  1. “Hay que educar al hombre para que respete las leyes.

Sin leyes no hay sociedad humana, y las leyes sólo tie- nen valor si cada persona las acepta y las respeta y las hace respetar”.

  1. “La creación de la conciencia moral es el fin último de la evolución social. Lo que persigue el hombre es lo Lo bello, lo útil, lo justo y lo verdadero están dirigidos al establecimiento de una sociedad en que la conciencia so- cial esté tan educada y evolucionada, que la bondad sea un principio naturalmente ejercido por todos”.

31. “La libertad es un bien que no puede ponerse en peligro por debilidades, y el aire de la libertad se contamina de sutiles venenos allí donde en su nombre se permite que florezca la villanía. La energía no tiene por qué ser arbi- traria; pero si tuviera que ser excesiva en la formación de una conciencia social sensible a lo bello, rebelde a la grosería y a la maldad, es preferible padecer su exceso a sufrir el despotismo hamponesco de las tiranías, que en gran medida se alimentan de esa ausencia de sensibili- dad social y en la incapacidad para rebelarse ante lo feo y lo malo”.

  1. “No es ciudadano el que ignora cuáles son sus deberes y cuáles son sus derechos (…). No puede haber paz donde no hay conciencia cívica y no hay conciencia cívica don- de no hay cultura”.
  1. “Los jóvenes que aspiran a ejecutar su obra de un día para otro se exponen a desencantos dolorosos, pues nada que no tenga sus raíces en el tiempo puede perdurar. Y la única manera conocida de enraizar algo en el tiempo es trabajando”.
  1. “Cuando se está ante una tarea larga y complicada, es mejor madrugar lo más que se pueda y acostarse sólo cuando ya no queden fuerzas para seguir en pie”.
  1. “Toda obra de la creación —del hombre o de la natura- leza— se realiza en el seno del tiempo, y hay una sola manera de llevarla a cabo, que es trabajando. El creador, pues, está obligado, por la misma fuerza que lo lleva a crear, a sumergirse en el tiempo para trabajar”.
  1. “No podría haber disciplina donde faltara la mística, pero tampoco podría haber mística donde faltara la dis- ciplina, y nadie puede imponer la disciplina allí donde trabajando en una misma tarea cada quien la lleva a cabo como le parece, no como debe hacerse”.
  1. “Con el amor verdadero todo cobra un aspecto maravi- lloso, y aquello que vimos durante años lo volvemos a ver asombrados de notarle algo distinto: es uno mismo quien ha renacido, y al pasar a nuestro través, la vida se hace fecunda en nuestra sangre y pone en cuanto nos rodea esencia, espíritu de nosotros mismos. El amor nos torna dueños del mundo”.
  1. “Sin amor es imposible hacer algo creador. La gallina, que es considerado el más cobarde de los animales do- mésticos, se lanza como pequeña fiera emplumada so- bre el que se acerque demasiado a sus polluelos. El amor hace fuerte a los débiles y valientes a los cobardes. El amor obra milagros”.
  1. “El escritor es un hombre de su tiempo, y siendo un hombre de su tiempo tienen que afectarle las condicio- nes en que vive el pueblo, la situación general del mun- do, y éstas preocupaciones se van a reflejar en su obra”.
  1. “Prefiero al escritor comprometido, pero comprometi- do con la causa buena, y la causa buena es la lucha por la liberación de los pueblos, por la liberación de los hom- bres. La causa buena es la que señala un rumbo, un cami- no hacia el futuro, un camino hacia el mayor bienestar de la humanidad, no de una minoría que viva a expensas del resto de la humanidad, sino de la humanidad com- pleta. El escritor debe tener una conciencia bien clara de que el mundo mejor sería el mundo donde todos pudieran ser escritores y pintores y músicos y bailarines y cantantes. Es decir, el mundo donde las facultades humanas, las mejores facultades humanas, se expresa- ran con mayor intensidad y mayor brillo”.
  1. “No creo que literatura puede cambiar el mundo, pero creo que la literatura como toda actividad humana, con- tribuye a iluminar la mente de los hombres, y que pue- de embellecer, enriquecer mucho la vida del hombre. La literatura no puede escapar de ninguna manera a la realidad social, económica, política, cultural, de los se- res humanos”.
  1. “En su significación más amplia y profunda, la pala- bra cultura significa la acumulación de todos los co- nocimientos y de todas las artes que la humanidad ha venido creando en su larga lucha en dominar la natu- raleza que lo rodea, de la cual saca su sustento, su techo, lo que la viste y cura, y en suma, todo lo que ha necesitado para mantenerse con vida y constante evolución”.
  1. “A la patria no se le usa, se le sirve”.
  1. “Nosotros somos una tierra pequeña, que sólo podemos engrandecernos por el amor, por la virtud, por la cultu- ra, por la bondad”.
  1. “Si para nosotros no hay nada tan admirable, hermoso y grande como el hombre, nada puede ser más admirable, hermoso y grande que el pueblo dominicano”.
  1. “Lo primero que hizo Duarte fue creer, como lo creyó, que en un país que para el año de la fundación de La Trinitaria no debía tener más de cien mil habitantes, si es que llegaba a tenerlos, pudiera establecerse una república independiente capaz de sostenerse durante mucho tiempo (…). Juan Pa- blo Duarte tuvo el coraje de creer que en un territorio pe- queño, deshabitado e incomunicado interior y exteriormen- te podía establecerse una república. Para creer eso era necesario tener una fe inconmovible en la capacidad de lu- cha del pueblo dominicano, y Duarte la tuvo”
  1. “Una cosa es tener creencia y poner en ella toda la fe de que es capaz el alma humana y otra cosa es dedicarse a convertir esa creencia en realidad, y Duarte fue capaz de hacer esto último. Ahora bien, para hacerlo tuvo que escoger un método de organización (…): fundar una aso- ciación secreta formada por doce hombres, todos jóve- nes, que el propio Duarte escogió tomando en cuenta sus condiciones intelectuales, morales y hasta físicas; es decir, tomando en cuenta su calidad. Para Duarte, la lucha que debía llevarse a cabo tenía que ser organizada partiendo de la calidad política y humana de los que iban a dirigirla”.
  1. “Entre las guerras justas, la que se hace para defender la patria es la de más alta categoría histórica”.
  1. “La historia de la lucha por la libertad en la cual se han consumido generaciones y generaciones de latinoameri- canos desde principios del siglo XIX; es, en suma, la mis- ma guerra a muerte que hemos sostenido en América con- tra poderes extranjeros y reacción nacional aliados”.
  1. “El patriotismo es un instinto pero su ejercicio sólo se justifica cuando conduce al bienestar de las mayorías”.
  1. “Preparémonos a bastarnos a nosotros mismos. A levan- tarnos con nuestras fuerzas; a labrar la estatua de nues- tro porvenir con manos dominicanas”.
  1. “Esta tierra es de los dominicanos, no de un grupo de dominicanos; que su riqueza es para los dominicanos, no para un grupo de dominicanos; que su destino es el de la libertad, no el de la esclavitud; que su función es unirse a América en un camino abierto y franco hacia el disfrute de todo lo que significa para los pueblos la li- bertad pública y la justicia social”.
  1. “No deseamos el poder para gobernar con amigos con- tra enemigos, sino para gobernar con dominicanos para el bien de los dominicanos”.
  1. “Las masas son el alma del país, las destinatarias de nues- tras esperanzas, y su liberación es el objeto de nuestros trabajos”.
  1. “Pongamos todos juntos el alma en la tarea de acabar con el odio entre los dominicanos, como se acaba con la mala hierba en el campo que va a ser sembrado. Ponga- mos todos juntos el alma en edificar un régimen que dé amparo a los que nunca lo tuvieron, que dé trabajo a los que lo buscan sin hallarlo, que dé tierra a los campesi- nos que la necesitan, que dé seguridad a los que aquí nacen y a todos los que erran por el mundo en pos de abrigo contra la miseria y la persecución”.
  1. “El mundo en que vivimos parece estar lleno de sober- bia y de odios. Pero cuando entramos en él con la mira- da limpia del que no tiene amarguras, hallamos que mi- llones y millones de personas trabajan en silencio por un mañana mejor. Nosotros los dominicanos debemos unirnos a esa legión de hombres y mujeres que marchan hacia el porvenir”
  1. “Vamos a juntar al hombre con la tierra; al inteligente hombre dominicano con la rica tierra dominicana. Y estemos todos seguros de que eso se hará o no habrá democracia en este país”.
  1. “Creemos en la libertad, en la dignidad y el derecho del pueblo dominicano a vivir y a desarrollar su democracia con libertades humanas pero también con justicia social”.
  1. “Trabajemos por nuestro pueblo y por América, traba- jemos con tesón y con humildad (…). Todos seremos polvo algún día, y de nosotros quedará el recuerdo sólo si le damos a este pueblo y a la América lo que el pue- blo dominicano y la América esperan de nosotros. Te- són para la lucha y humildad para recibir la opinión de los adversarios y el juicio de la historia: es lo que les ofrecemos a ustedes”.
  1. “Hagamos un alto. Yo he venido aquí para pedirles esto y para servir en esto. Yo estoy dispuesto a hacer cuanto deba hacer, a arrodillarme ante quien deba arrodillar- me, para que podamos sacar de mi humillación, si es necesaria, y de la disposición de ustedes, que es impres- cindible, una fórmula de convivencia democrática”.
  1. “En una democracia no debe haber más gobierno que el de las leyes, y los hombres, cualesquiera que sean sus posiciones, están llamados a ser sólo los ejecutores de las leyes”.
  1. “Sin respeto al derecho ajeno no puede haber paz y sin paz no puede haber bienestar para los millones de do- minicanos que reclaman una vida mejor”.
  1. “La democracia respeta al ser humano y exige que se respete el orden público y demanda honestidad”.
  1. “La democracia es una manera de vivir, no sólo un siste- ma de gobierno, y el fundamento moral de la democracia es el respeto entre los hombres, entre los partidos, entre los grupos sociales”.
  1. “Para mantener la democracia hay que esforzarse en con- servar la moral política y administrativa, y sin esa mo- ral los partidos democráticos no pueden aspirar a ser seguidos por el pueblo”.
  1. “Un gobierno democrático debe tener los oídos abiertos para oír la verdad, ojos activos para ver lo mal hecho antes de que se realice, mente vigilante para que nadie ponga en peligro la libertad de cada ciudadano, y un corazón libre de odios, dedicado día y noche al servicio del pueblo”.
  1. “El poder es una fuerza creadora si se usa en favor del pueblo, es una fuerza destructora y nefasta si se usa con- tra el pueblo”.
  1. “La democracia es un régimen político que se mantiene sobre la voluntad de todos los sectores sociales y de to- dos los individuos que tienen alguna responsabilidad que cumplir como ciudadanos. Si falta esa voluntad, la democracia no puede sostenerse”.
  1. “Una democracia no se sostiene si no hay un pueblo que la practique y la defienda”.
  1. “La libertad sirve para edificar, pero también sirve para destruir; y en medio de la libertad los hombres que han nacido para destruir destruyen libremente, mientras que los que han nacido para edificar edifi- can con trabajo, con lentitud y cercado por las pasio- nes, a veces por las pasiones más bajas. Un pueblo que no está hecho a la vida democrática puede ser confun- dido hasta el punto de que sólo vea de la democracia el lado malo”.
  1. “Los hombres pueden caer pero los principios no. Noso- tros podemos caer pero el pueblo no debe permitir que caiga la dignidad democrática. La democracia es un bien del pueblo y a él le toca defenderla”.
  1. “El arma más poderosa con que puede contar una na- ción, sea a su favor o sea en su contra, no es la bomba H ni el anticohete orbital; es la opinión pública mundial. El pentagonismo podrá tener de su lado el interés de los que acumulan poder y dinero, pero no tendrá de su lado a los que aspiran al reino de la justicia sobre la Tierra. La simple palabra de Jesús acabó siendo más poderosa que las arrogantes legiones de Roma”.

73.“Nadie puede superar al pueblo en el conocimien- to profundo de la realidad nacional porque él vive esa realidad día a día de manera práctica, o bien cosechando los beneficios que le puede proporcionar esa realidad o bien padeciendo los males que ella le produce”.

  1. “El pueblo dominicano es una buena tierra para la semilla de la democracia. En esa tierra, más tempra- no o más tarde, van a germinar las semillas de la re- novación”.
  1. “Un tirano no cae del cielo; sale de las entrañas de su gente, se nutre con los vicios del país en que se forma. Y como esos vicios son comunes a toda su generación, se explica que en ella encuentre servidores, porque habría muchos como él”.
  1. “La tiranía es la organización de la peor porción de cada colectividad, de sus instintos más primarios, de sus ape- titos menos nobles”.
  1. “Un mal gobierno no se produce espontáneamente, es el resultado de la infección del cuerpo social (…) que en determinadas circunstancias favorables a su desarrollo, acaba tomando posesión del organismo colectivo”.
  1. “El caudillo es el que manda; el líder es el que dirige”.
  1. “La política es una función de servicio, y por tanto emi- nentemente moral”.
  1. “No hay corazón infatigable para sufrir, no hay pueblo infatigable para padecer agresiones; llega una hora en que no se puede sufrir más y en que no se puede humi- llar más”.
  1. “Para alcanzar la categoría de héroes los hombres y las mujeres no necesitan ser letrados; lo que necesitan es tener la capacidad de crear actos, de producir hechos que abran las compuertas de la acción colectiva, sin detenerse a pen- sar cuántas vidas y cuántos dolores costará esa acción”.
  1. “La política justa es como la guerra justa y requiere, como ésta, la unidad de los líderes y la unidad del pueblo”.
  1. “Un pueblo sin un jefe puede llegar siempre más lejos que un jefe sin pueblo, pero cuando un pueblo encuen- tra su jefe natural, escribe páginas nuevas en la historia de la humanidad”.
  1. “El conocimiento de la sociedad tiene que ser previo al de sus líderes debido a que éstos sólo pueden desarro- llarse a cabalidad cuando hayan actuado en consonancia con la realidad… Al darse esa consonancia, la voz popu- lar dice que el líder o los líderes que la logran son los que mejor expresan las aspiraciones del pueblo; y con esas palabras se destaca el hecho de que nadie puede superar al pueblo en el conocimiento profundo de la realidad nacional porque él vive esa realidad día a día de manera práctica, o bien cosechando los beneficios que le puede proporcionar esa sociedad o bien padeciendo los males que ella le produce, según sea la posición que ocupa cada quien en la sociedad”.
  1. “El líder es aquel que expresa lo que el pueblo piensa y siente pero no puede expresar; y si es así, no hay ni pue- de haber líder sino hay una parte del pueblo que com- parta lo que él piensa y siente, y en consecuencia, los partidarios y el o los líderes son igualmente importan- tes en la formación de un partido; unos no tendrían exis- tencia social sin los otros”.
  1. “El que no se dé cuenta de que los cambios sociales se producen en el seno de la historia no puede dedicarse a la política con éxito porque nunca comprenderá lo que pasa alrededor suyo”.
  1. “Los insultos y las infamias de los contemporáneos dan a menudo con más frecuencia que los elogios la verda- dera medida de los grandes hombres: a mayor altura del campeón, mayor saña del improperio”.
  1. “El que sale a pelear por los demás no debe ir cabal- gando sobre la esperanza de cosechar aplausos y víto- res nada más”.
  1. “Lo más importante para líderes y partidos es distin- guir entre amigos y enemigos. Si se trata de líderes y partidos revolucionarios, su amigo es únicamente el pueblo, y los enemigos del pueblo son sus enemigos”.

90. “Nada enseña a un pueblo tanto como la lucha”.

  1. “Es un error creer que un partido es bueno porque ten- ga mucha gente que le siga; y muy bien puede resultar todo lo contrario, que precisamente por tener mucha gente que le siga, un partido puede ser malo y hasta malísimo si esa gente que está en él o lo sigue son parti- darios de ideas malas”.
  1. “Lo que tiene que tener un partido político no es una mayoría de los miembros, sino una gran autoridad mo- ral sobre su pueblo”.
  1. “Hombres y mujeres que tienen conciencia no sólo de que la sociedad cambia y se mueve sin cesar en direc- ción de tal o cual cambio, sino que tienen además la voluntad de ser agentes vivos de cambios que convier- tan al pueblo en una sociedad libre”.
  1. “En un partido de base ideológica firme los líderes diri- gen a las masas, pero en los partidos populistas las ma- sas dirigen a los líderes”.
  1. “La finalidad de las revoluciones no es destruir; es con- vertir un sistema económico y social en otro más justo. Solamente los locos se dedican a destruir, y los revolu- cionarios no son locos”.
  1. “Una revolución no se hace con votos, pero no puede hacerse si la mayoría del pueblo se le opone. Que no se engañe nadie. La revolución es el más democrático de todos los procesos históricos, pues sólo puede realizarse cuando está apoyada en la voluntad del pueblo (…). Una revolución se hace para beneficiar al pueblo, no para castigarlo, y el pueblo tiene que estar convencido de eso o no la apoya, porque nadie da su respaldo a lo que cree que va a hacerle daño”.
  1. “La revolución tiene que ser la obra del pueblo, no de ningún sector elegido”.
  1. “Las revoluciones son hechas por las minorías militan- tes, pero no todas esas minorías, y no por los pueblos, Cuando las minorías revolucionarias interpretan cabal- mente las ansias de los pueblos, no sólo las históricas sino también las de un momento dado de su existencia, los pueblos apoyan a esas minorías,  pero es difícil sino imposible, que la totalidad de un pueblo se integre en un proceso revolucionario (…). Si todo el pueblo apoya- ra una revolución no sería necesario hacer esa revolu- ción en su etapa de conquista del poder”.
  1. “Las revoluciones verdaderas, auténticas, estallan cuan- do la violencia concentrada de la sociedad impide el desarrollo de las fuerzas productivas. Si el estallido se produce en el momento histórico en que hay que ba- rrer un sistema económico y social que se ha sobreve- nido a sí mismo, o sea, que ha durado más allá de lo que correspondía al tipo de fuerzas productivas que es- taban en la base de su existencia, la revolución se pre- senta con un poder demoledor de todo lo viejo al que nada ni nadie puede resistir, pero al mismo tiempo apa- rece con un impulso creador de la nueva sociedad, que la hace invencible, no importa cuánta sea la capacidad de violencia que pueda poner en acción sus enemigos”.

100.“Es el pueblo el que tiene que crear la sociedad del futuro; es él, a través de todos sus sectores sociales, el que tiene que decir cómo deberá funcionar, y además es él quien decidirá cómo se organizará”.