Como ha sido la tradición al inicio del año, abundan las felicitaciones y parabienes entre familiares, amigos, vecinos, allegados, deseando los mejores parabienes.
Son buenos deseos que entran en conflicto con una cruda realidad. Un entorno internacional desfavorable, con inflación, conflictos armados, alzas de combustibles y de los alimentos.
En torno a República Dominicana existe un ambiente hostil caracterizado por la violencia, delincuencia e inseguridad y alto costo de productos esenciales, como plátanos, huevos, papas, entre otros.
El desconcierto predomina en la ciudadanía desengañada con saturadas promesas de cambios, que han traído desaliento y frustraciones.