Es un comentario universal las torpezas e inhabilidades del flamante Presidente de los Estados Unidos. Sus burlas y pesadas bromas van cansando. En estos días se ha burlado de los hermanos puertorriqueños, los ecologistas son motivos de carcajadas para él, al igual que la política de medio ambiente. Para cerrar la semana en la cumbre del G7 que se acaba de celebrar en Biarritz, Francia, declaró que le gustaría que la próxima reunión de los países del G7, los mas poderosos del globo, se celebre en uno de los complejos de su propiedad en Estados Unidos. ¿Será buscando negocios? Es lo que lleva a un periódico local a decir que Trump es lo que se conoce como un “espíritu burlón”