Al parecer el electo presidente del Colegio de Galenos se ha cogido en serio aquel parecido que la gente le ve con el famoso muñeco de la saga misteriosa y no bien asume sus funciones hace reclamos exorbitantes y fuertes amenazas al sector, sobre todo a los pacientes. Los propios colegas suyos deben recomendarle su te de manzanilla y echarle su gota de Valeriana. Waldo estos son otros tiempos .