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SpaceX lanzó el octavo vuelo de Starship, que nuevamente falló, y dejó hasta hoy una estela de luces raras en el cielo y escombros espaciales por los cuales detuvieron vuelos hacia aeropuertos de Florida en Estados Unidos.
Al igual que la séptima prueba, el implementado la víspera también terminó con la pérdida del vehículo Starship que estaba a solo unos 20 segundos del final de su ascenso cuando SpaceX perdió contacto con la nave.
De acuerdo con un informe de la compañía, varios de los motores se apagaron visiblemente durante la transmisión en vivo y este fenómeno ocurrió aproximadamente en el mismo punto que lo hizo durante la misión del vuelo 7, cuando Starship explotó sobre islas pobladas en Turcas y Caicos, esparciendo escombros por las islas y golpeando un automóvil.
SpaceX compartió una actualización en X, detallando que durante el ascenso de Starship, el vehículo experimentó una desintegración rápida no programada y se perdió el contacto.
“Nuestro equipo comenzó de inmediato la coordinación con los funcionarios de seguridad para implementar respuestas de contingencia preplanificadas y revisaremos los datos del vuelo de prueba para comprender mejor la causa raíz. Como siempre, el éxito proviene de lo que aprendemos, y el vuelo de hoy ofrecerá lecciones adicionales para mejorar la confiabilidad de Starship”, escribieron en la red social también propiedad del dueño de Space X, Elon Musk.
Dan Huot, portavoz de SpaceX, contó que “vieron cómo varios de los motores empezaban a pararse”.
“Una vez que se pierden suficientes motores centrales, se pierde el control de la actitud. Y entonces vimos que la nave comenzó a girar y, en ese momento, perdimos contacto con la nave”, añadió.
Ante estos eventos, la Administración Federal de Aviación (FAA) detuvo algunos vuelos hacia los aeropuertos de Miami, Fort Lauderdale, Palm Beach y Orlando por “escombros espaciales en caída”.
Mientras tanto, en Cuba, tal y como sucedió el pasado 18 de febrero, con el vuelo número 7, nuevamente fue avistada este jueves una luz en el cielo proveniente del lanzamiento del cohete Starship, de SpaceX, lanzado desde la base de la compañía en Boca Chica, sur de Texas.
También en redes sociales mostraron escombros en llamas que surcaban los cielos al anochecer cerca del sur de Florida y las Bahamas después de la ruptura de Starship en el espacio.
Cambios o mejoras probadas y explotadas
Según los científicos de SpaceX, el ensayo de vuelo de este jueves tenía como objetivo poner a prueba a Starship para que los equipos de la misión pudieran concentrarse en los puntos débiles.
Con este fin, los ingenieros eliminaron varias placas de protección térmica de Starship para probar las áreas vulnerables en toda la nave espacial, diseñadas para proteger el vehículo mientras experimenta temperaturas superiores a los mil 427 grados Celsius (°C) al reingresar a la atmósfera de la Tierra.
En este sentido, los expertos pusieron nuevas opciones de placas, incluida una metálica que ofrece enfriamiento activo, para ver qué materiales pueden proteger mejor a la nave espacial.
También modificaron las líneas que alimentan combustible a algunos de los motores de Starship y ajustaron las temperaturas del propulsor.
Otro cambio fue ajustar el “objetivo de empuje operativo” del vehículo, es decir, cuánta potencia SpaceX espera que generen los motores durante el vuelo.
Por otro lado, aumentaron la altura de Starship a 6,5 pies (dos metros) más alto que antes, con aproximadamente un 25 por ciento más de volumen de propulsor, lo que podría permitir que la nave espacial realice misiones más largas en el futuro, detallaron los expertos.
En oposición redujeron las aletas delanteras de Starship, que reemplazan la necesidad de alas y comprime el combustible necesario para el aterrizaje, además de colocarlas en la parte superior del vehículo, alejándose del escudo térmico.
“Con esa mejora de diseño esperamos reducir la exposición de las aletas al calor durante la reentrada”, puntualizaron los ingenieros de SpaceX.
Añadieron una computadora de vuelo más potente al propulsor Super Heavy y revelaron que SpaceX la compañía está expandiendo las operaciones de Starship a Florida, construyendo una nueva instalación llamada Gigabay junto a su ubicación actual de HangarX en el Centro Espacial Kennedy de la NASA.