Leonel confía en que autoridades tomarán medidas para que votaciones de México transcurra en paz

La Organización de los Estados Americanos ve «con preocupación» la violencia en el proceso electoral mexicano, pero confía en que las autoridades tomen medidas para que la jornada del 1 de julio transcurra en paz, dijo hoy el jefe de la misión de observación, Leonel Fernández.

«Estamos preocupados, pero confiados en que se tomarán medidas y el proceso se llevará a cabo de forma adecuada, con respeto absoluto al derecho de los ciudadanos a ejercer el sufragio», afirmó Leonel Fernández a la agencia de noticias  Efe

Los integrantes de la misión, que comenzaron la semana pasada sus trabajos en el país, han podido conversar con autoridades, especialmente con las de seguridad pública, y estas les han hecho saber que llevarán a cabo acciones «extraordinarias» de prevención «para facilitar que los electores puedan acudir a las urnas.

La OEA desplegará, en 25 estados del país, a 60 expertos y observadores de 23 países.

La elección de las sedes donde estarán los integrantes del grupo corresponde a una «muestra aleatoria que ha indicado que son los lugares más adecuados para estar presentes», apuntó Fernández.

Desde allí harán un análisis sustantivo del proceso electoral en materia de organización y tecnología electoral, financiación de campañas, justicia electoral, participación política de las mujeres y de los pueblos indígenas, y seguridad electoral.

En cuanto a un eventual fraude, otro de los viejos fantasmas que planea sobre el proceso electoral, el expresidente dominicano refiere que, para encarar esta preocupación, el Instituto Nacional Electoral (INE) ha preparado una «tecnología electoral que es bastante sofisticada».

El órgano electoral cuenta con los materiales suficientes, así como con expertos, para hacer frente a «cualquier tipo de interferencia o hackeo que pueda haber», y ha emprendido otras acciones para asegurar que en el escrutinio y la difusión se «garantice la transparencia».

Fernández defiende que en otras ocasiones la OEA ha hecho acopio de «denuncias y quejas», y siempre ha «informado a las autoridades para que puedan tomar cualquier decisión» al respecto.

Este proceso electoral es el más grande y costoso de la historia del país. El próximo domingo convocará a 89 millones de mexicanos a las urnas para elegir unos 3.400 cargos públicos, entre ellos los de presidente del país, diputados y senadores.

Estas elevadas cifras son todo un reto en cuestión de transparencia, pero el jefe de misión de la OEA señala que esto se ve compensado por una «mayor participación de las autoridades».