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Por: María Hernández | A propósito de la gran cantidad de agua que ha caído esta semana como consecuencia del fenómeno atmosférico Melissa y que gracias a Dios en nuestro país dejó más pérdidas materiales que humanas, una sola persona, observamos que en estas épocas lluviosas los supermercados se mantienen llenos de personas en busca de alimentos.
Algunos tuvieron tan buenas ventas que los tramos se observaban completamente vacíos, en especial en las áreas de los panes, como se pudo observar en los medios de comunicación y redes sociales.
Otros afirman que la lluvia les da más hambre y los obliga a visitar colmados y supermercados con más frecuencia.
El municipio Santo Domingo Este es uno de los que cuenta con más supermercados en avenidas como Las Américas y la Ecológica.
Las personas desafían las inundaciones en zonas urbanas y rurales para acudir a comprar al supermercado.
Cada supermercado tiene una estrategia para mantener su clientela. Muchos ponen llamativas rebajas para atraer a los usuarios.
Otros tienen tarjetas con las cuales los clientes van acumulando puntos con cada compra.
En los colmados no ofrecen esos descuentos, pero los compradores fieles pueden aprovechar para solicitar un fiao si no tienen dinero en el momento.
Mientras los supermercados también tienen la ventaja de que muchos están abiertos hasta las 12:00 de la noche con lo que quienes trabajan y llegan tarde a los hogares pueden aprovechar para ir de compras cuando regresen a sus casas o en el trayecto.
Otros prefieren no salir a mojarse y hacen sus pedidos en línea.
Un chocolate caliente es una buena opción para estos tiempos de lluvias que desde hace una semana no nos deja ver el sol.
