Se resalta este día las declaraciones ofrecidas por el Presidente de la República, Luis Abinader, indignado, respondiendo al pedido del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, quien solicitó al país “detener” el proceso de deportaciones de ilegales haitianos.
El jefe de Estado juzgó “inaceptables e irresponsables” las demandas del funcionario de la ONU recordando que “las políticas migratorias de cada país es una potestad de cada gobierno”, aseveración que todos los sectores nacionales respaldan.
Lo que sí se aprecia como un doble sentido es que el mandatario responda con indignación el planteamiento del funcionario de la ONU y abra las puertas a una funcionaria de tercera categoría del Gobierno de Estados Unidos, catalogando la reunión con ella como encuentro de Alto Nivel en el que planteó lo mismo que el comisionado de la ONU.
La incoherencia es otras de las cualidades del Gobierno del PRM, que piensa más en su imagen que satisfacer los anhelos y necesidades de sus ciudadanos y ciudadanas